Se me permitió la muerte.

Se me permitió la muerte, Pero no se me permite la vida, Es un extraño estado de derecho, El que marca la existencia misma, No quiero vivir en la miseria Que me provoca tu falsa humanidad, Esa que deja sin vivienda a unos, Esa que deja sin comer a más, ¿ monstruo me llamáis por ser diferente? Pues esa diferencia me hace más fuerte, No niego mi diferencia, Pues esta marca mi fuerza, Puede que no sea nada, Pero esta nada se expresa, ¡Aliméntame! con tu desprecio crearas mi falta de aprecio, puede que te manche la alfombra al plantarme, yo manchare mi ropa al alimentarme, de tu pobreza mental, de tu injusticia, de tu falsa verdad, hasta de tu risa. Haré de tu incapacidad Mi competencia Es tu decadencia. Mi silencio es tu final.